El FC Barcelona ha dado un golpe sobre la mesa en la última jornada de LaLiga, al vencer al eterno rival, el Real Madrid, en un Clásico que quedará grabado en la memoria de los aficionados. Con un marcador de 4-3, los culés han ampliado su ventaja en la clasificación a siete puntos, lo que les deja a un paso de alzar el título de liga.
La emoción del encuentro fue palpable, y tras el pitido final, el portero polaco Wojciech Szczesny no pudo contener las lágrimas, agachado en la medialuna de su área mientras sus compañeros celebraban la victoria por todo el campo. Este momento de desahogo refleja la presión acumulada durante la temporada y la importancia de este triunfo.
Sin embargo, la historia no termina ahí. En un gesto que ha llamado la atención de los medios, Szczesny fue visto después del partido fumando un vaper en el terreno de juego, lo que ha generado diversas reacciones entre los aficionados y expertos. Este no es el primer episodio relacionado con el tabaco del guardameta, ya que en el encuentro de ida, celebrado el pasado 26 de octubre, también fue captado celebrando el 0-4 en los vestuarios del Santiago Bernabéu de una manera poco convencional.
La renovación de Szczesny, en el aire
A pesar de su destacada actuación y de haber conquistado el cariño de la afición culé, la continuidad de Szczesny en el club no está asegurada. El portero ha recibido una oferta de renovación por dos temporadas más, pero ha declarado que aún no ha tomado una decisión. En sus propias palabras: "Tengo que decidir junto con mi familia qué es lo mejor para nosotros. En casa, la mayoría de las decisiones las toma mi esposa".
Este tipo de declaraciones han generado un debate sobre el futuro del jugador, quien ha salido del retiro para unirse al Barça y ha demostrado ser un pilar fundamental en la portería. La directiva del club está interesada en prolongar su contrato, pero la decisión final dependerá de su situación personal y familiar.
La temporada ha sido un torbellino de emociones para el FC Barcelona, que, tras años de altibajos, se encuentra a las puertas de conquistar LaLiga, un título que se sumaría a la Supercopa de España y la Copa del Rey ya obtenidas. Con tres jornadas por delante, los culés están más cerca que nunca de volver a reinar en el fútbol español.